Toreando damas

Master Zorrulla Konnc Hudda Vos the Hutt, alias "La Jefa" nos citó a todos muy temprano para mandarnos una instructiva en torno a ciertos cambios en la galaxia (con aumento de obligaciones), al parecer volveré a las andadas, claro que definitivamente ya no en el nivel extremo del año pasado (que dudo se vuelva a repetir alguna vez) ... pero la cosa es que andaré como agente encubierto por todos lados dentro de poco. Todo es porque se ha trazado la meta de eliminar de la faz de esta galaxia al escuadrón maldito del SRC (Sith Rancorarezzierenrung Chukiungsmusherzungung). Esto será un operativo especial aunque no dudo que más de un muggle acabara enterándose más temprano que tarde.
Grandioso, encima ahora resulta que andaré con la elfina doméstica Gorgona de escudera! El primer día que la conocí me miró de un modo que me recordó a Kreacher, otro elfo, pero ya nos llevamos bien.

Bueno, la cosa es que Master Vos citó más temprano de lo creíble y lo que es peor la gente llegó calculando la hora en que ella habría acabado la cháchara, encima preguntando “Ya acabó, no?”. Al parecer todo mundo asumió que el resto estaría tempranito y nadie notaría la tardanza propia de modo que el único temprano era yo, pero ni para hacer corito y platea.
Como el resto llegó bastante tarde, a Master Vos se le salió todo el lado oscuro y ya estaba comenzando a bramar y rugir.... eh.. digo... hablar de los castigos, las torturas y los encierros ... cuando la elfina domestica Gorgona le recordó que tenia ya temprano una reunión a propósito del rollo de los SRC con las agentes del servicio secreto... y la cita era 8 AM (de seguro para así librarse de Master Vos y el castigo). Pero Master Vos no quería dejarlas sin castigo y me pidió ir en su lugar, quién sabe que les habrá hecho, como veía que su cara se ponía más verde decidí fugar cuanto antes.

Como no es inusual en Mugglevania, a pesar que era tarde, en la practica llegué exacto pues recién iban a comenzar las ponencias y las rondas sobre el rollo éste que les cuento. Me sentí al comienzo como si me hubieran invitado al club de Bridge de las amigas de la mamá de la Barbie. Pura tía adentro. Al comienzo OK, todo era informativo.. luego me comencé a fastidiar cuando no faltaba alguna dándoselas de bruta o sorda y repreguntaba lo mismo varias veces, luego me di cuenta que era el viejo truco de atontar al expositor.... pues cuando llego el punto de las responsabilidades las esfinges y las hadas comenzaron a mostrar las garras... de un modo elegante y diplomático, claro... pero más mordaces que verduguillo de maleante de los bajos fondos. Bien macheteras las Ladies. Ninguno de los 2 bandos quería ceder .. y yo en medio. Al final una representante del Ministerio de la Magia tuvo que aparecer para callarlas y ponerlas en su sitio.
El resto de la sesión fue bastante mecánico, algo así como enseñarle a jugar juegos de estrategia de computadora a tu abuelita. Me late que la esfinge que trabajará conmigo se quiere hacer la loca... que ni piense que podrá enyucarme sus responsabilidades! Las esfinges son seres propensos a endulzarte con su floro y cuando menos lo esperas sueltan las garras retráctiles, pero si usas psicología y las logras domar pueden ser bastante útiles.

Algo bueno es que mi día ha acabado bastante más temprano.

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