Verdonita

No sé si a todos los pase, pero creo que muchos tenemos alguna cosa que nos incomoda en extremo, cuya presencia puede ser hasta intolerable. En mi caso es la verdonita.

La verdonita es una sustancia medio liquida usada dizque para asesinar millones de seres micrométricos de un tirón. Definitivamente si hay una presencia que me parece insoportable es justo ésa. Según unos amigos eso no es más que la alergia del comodón que no quiere limpiar. Lo cierto es que como normalmente la evito las molestias no pasan de algún dolor de cabeza con picazón transitorio y luego no pasó nada.
Pero esta vez me pasó algo que no había sentido antes, no sé que tanto fue real y que tanto psicosomático.
Estaba de paso por los territorios de Master Ah Kw cuando de pronto hubo un problema serio con un equipo y como había que correr a las profundidades del Fuerte para traer un dispositivo de inmediato me lo dejaron a mí al ser el más joven de los presentes.
Yo bajé y bajé las escaleras, nivel tras nivel.
De pronto comencé a sentir el olor débil al inicio y luego más fuerte. Cuando ya faltaban pocos escalones para bajar al ultimo sótano, lo vi.

Todo el piso estaba regado de verdonita.
¡Aaaaaaag! Pensé.
Y vi que donde tenia que ir yo era un ambiente al otro extremo de todo eso, al parecer alguien recién había echado eso al piso recién y por alguna razón lo había dejado todo así de súbito. Vi utensilios relacionados tirados a un rato.
Hummm.. sólo es cruzar, sacar y subir – pensé yo.
Pegué un salto para bajar los escalones restantes y fui corriendo para tratar de recorrer todo el trayecto del salonzazo conteniendo la respiración.
Entonces llegue para abrir la puerta del pequeño ambiente. Y la abrí.
Para qué la abrí.

De golpe se abrió a mi el equivalente a una onda de choque verdonítica liberada al fin con la apertura de la puerta.
Algún tarado había dejado volteado un contenedor y todo chorreaba desde arriba, los utensilios bajo sí embarrados, el piso embarrado.

De la impresión casi me desplomo. Ahí fue cuando ya no aguanté el vértigo, los mareos, el dolor de cabeza. Mandé todo al diablo y me alejé como pude hecho un zombie.
¡Que feo en verdad! Después de eso ni más.
Al final me enteré que me habían mandado al sitio equivocado y no fue necesario que dijera que no había encontrado lo buscado. Obviamente no conté lo que me pasó.

Tags: Dinorider kryptonite kryptonita