Llegando y escapándome

Sí pues al parecer no puedo con mi genio, regreso a pasarlo con la familia el fin de semana y me encuentro con una amiga cuya mejor amiga está pasando una temporada allá en Chincha. Y de la nada me propone ir a Chincha a sorprenderla. Nomás que ya eran algo más de las 2 de la tarde, ninguno de los dos estaba tan preparado, así que cargamos nuestras mochilas con agua y algo de comida para el viaje. El ómnibus que tomamos fue bien lenteja... casi como tortuga pero a cambio vimos dvds buenos y hasta con los adicionales que meten en los originales aparte que la vista del mar al sur con el sol reflejándose estaba buenaza. Si piensan ir por la playa León Dormido les cuento que casi no vi gente así que aprovechen. Finalmente llegamos a Chincha casi 3 horas después de salir de Lima y el ver la cara de sorpresa de nuestra amiga nos alegramos bastante, es que del ómnibus le llamamos diciéndole que ibamos para allá y no nos creía que de veras iríamos. Nos paseamos alguito y como nunca antes había ido allá me sorprendió bastante no ver ni un sólo negro!!!!, no que dicen "¡vamo pa Chincha familia!". La gente por allá es bastante atenta y las cosas son bastante económicas. Me rellené de dulces de Chincha y les traje algo a mis papis (hay buen vino) .... que me esperaban para almorzar nomás que regresé bastante de noche.

Valió la pena la escapada inesperada.