Nature cuenta que esa fue la conclusión del estudio de cráneos de Triceratops por parte del equipo de Denver Fowler del Museo de las Rocosas en Bozeman, Montana. Él y sus colegas estudiaron numerosos especímenes de la Formación de Hell Creek de Montana y lo concluyeron por la orientación de las marcas de los T-Rex en los cráneos de sus presas.
Nature doi:10.1038/nature.2012.11650